sábado, 19 de febrero de 2011

La bicicleta en Córdoba. Su futuro

Futuro incierto  (foto R.Morrison)
Es una pena ver pasar el tiempo y comprobar cómo esta ciudad no se decide a emprender una decidida acción en favor de la bicicleta como medio de transporte. Hasta ahora ha reinado, hay que reconocerlo, la mucha palabrería y muy poca concreción.

Fue hace prácticamente 15 años, corría el mes de diciembre del año 96, cuando este ayuntamiento, o más bien el entonces concejal de Los Verdes (ya escindidos de IU) Pepe Larios, presentó un proyecto a la Unión Europea para la construcción de los primeros carriles bici en Córdoba.

Las cosas de la política hicieron que el dinero concedido a nuestro ayuntamiento para ello (programa POMAL de los fondos FEDER) fuera gestionado a la postre por el Partido Popular, que gobernaría esta ciudad entre los años 1997 y 2003. En concreto quien lo hizo fue su concejal Julio Berbel, que después de haber sido el responsable de un Área de bastante mayor responsabilidad como era la Hacienda municipal, “fue relegado” a la siempre menos importante Área de Medio Ambiente.

Y fue él quién, extrañamente, sacara adelante dos acciones muy importantes para la bicicleta en Córdoba: la aprobación en pleno del Plan Director de la Bicicleta de Córdoba (con la oposición de Izquierda Unida) y la construcción del complejo Carril-bici Eje Norte Sur (desde el puente San Rafael hasta la Avda. de América).

Posteriormente, con la vuelta de Izquierda Unida al gobierno municipal, la bicicleta languideció de nuevo en Córdoba. La verdad, todo hay que decirlo, es que esto se debió principalmente al bloqueo que la anterior “alcadiosa” Rosa Aguilar estableció sobre las políticas de movilidad sostenible.

R. Aguilar. Rally Trassiera Sept. de 2003
Todos sabemos de su gusto por las grandes infraestructuras, y de su pasión por las motos (no tenía ningún reparo en dejarse fotografiar con motoristas de parafernalia y tatuajes fascistas) y por los coches de carreras (famosa ya su foto con casco dentro de un coche de competición en el rally de Sierra Morena).

Quien la ha visto y quien la ve; ahora es Ministra de Medio Ambiente.

El caso es que Córdoba, después de haber sido una de las primeras ciudades en España en plantearse la promoción de la bicicleta como medio de transporte, está acabando en el furgón de cola del cambio hacia una movilidad urbana sostenible. Insuficientes han resultado hasta ahora los buenos propósitos que el actual concejal de Medio Ambiente Curro Cobos está desarrollando en los últimos tiempos en su favor; en concreto, desde que pudo hacer algo después que la rosa “se marchitó a Sevilla”.

Algunos datos para la comparación: 
  • Mientras en Zaragoza hay en la actualidad, una red para el préstamo de bicicletas urbanas que cuenta con 100 estaciones y 1.000 bicicletas que utilizan 29.000 ciudadanos (en breve se ampliarán con otras 30 estaciones que permitirán dar servicio a 10.000 abonados más de los 20.000 en espera), en Córdoba tenemos la miserable cantidad de 36 bicicletas y 4 estaciones de anclaje. Es decir, aproximadamente una relación 30 veces inferior, cuando la población es si acaso la mitad.
  • Mientras en Sevilla se construyó en apenas un par de años una muy completa red de carriles bici que abarca toda la ciudad, aquí llevamos 15 años y sólo hemos logrado la deshilachada red que tenemos, cuya mayor extensión en los últimos tiempos se está produciendo gracias a los carriles bici que construyen las promotoras de los nuevos espacios urbanos (por la obligación que fijó el Plan General de Ordenación Urbana), a los que sólo habría que sumar algún carril bici suelto como el de la avda. Linneo (Jardín Botánico y Parque Zoológico) y la intervención que se realizó para proteger el, en un primer momento completamente inútil, carril-bici de la avda. Agrupación Córdoba (antiguo Hospital Militar)
  • Mientras en San Sebastián están trabajando ya sobre un Plan de Movilidad que se marca entre otros objetivos alcanzar para el 2016 una proporción de viajes en bicicleta superior al 35%, ¿cuáles son los objetivos que tenemos aquí en Córdoba? ¿qué queremos para nuestra ciudad?
Creo que se hace imprescindible la entrada en el ayuntamiento de nuevas personas con ideas claras sobre cuáles son las políticas más apropiadas a desarrollar para alcanzar lo antes posible un modelo de movilidad urbana sostenible.

La bicicleta necesita de personas que crean en ella. Mejor aún si se mueven en ella.
 

sábado, 12 de febrero de 2011

Política y políticos

Voy a realizar un arriesgado ejercicio: reivindicar a la política y a los políticos.

Es arriesgado y difícil este ejercicio porque actualmente parece haber pocas cosas más denostadas.

“Política”, dice la wikipedia, es la actividad humana que tiende a gobernar o dirigir la acción del Estado en beneficio de la sociedad . Procedería del término griego “politikós”, término que tiene varios significados: (1) ciudadano, (2) civil, y (3) relativo al ordenamiento de la ciudad.

Así pues, por su significado en origen, todos somos ciudadanos, ya no por ser habitantes de la ciudad, de la polis, sino por serlo de un estado, y todos seríamos así mismo políticos en el sentido de estar involucrados en el gobierno, en sentido amplio de la palabra, de nuestra sociedad. Podemos hacer o dejar de hacer, es decir, dejar que otros hagan, pero de todos depende de una manera más directa o más indirecta (incluso en las sociedades no democráticas), el cómo sea el gobierno de nuestra sociedad.

Sin embargo, aunque ese debía ser el significado de la política y lo político, lo cierto es que para una inmensa mayoría de la población la política es algo curiosamente ajeno (aunque casi todos hablan de ella) que practican para su propio provecho esas egoístas e interesadas personas que son los políticos.

La imagen que se tiene de los políticos difícilmente puede ser más negativa. Según diferentes estudios del Centro de Estudios Sociológicos, el “Índice de confianza política” ha ido descendiendo desde un 46,6 en 2004, hasta un 45,5 en 2008, un 41,1 en 2009, un 39,3 en 2010, y un 34,8 % en 2011 (mes de enero en todas las referencias). En realidad, no parece demasiado negativo este índice, que no tengo claro del todo qué significa: un 34,8 % de confianza política me parece bastante elevado.

Veamos otros indicadores. Según el CIS (datos de enero de 2011), preguntados los españoles por cuáles consideran los 3 problemas más importantes existentes en España, la respuesta daba como resultado que los dos primeros eran con mucho el paro y la situación económica, y el tercer problema más grave era “la clase política y los políticos”. No es extraño con todo lo que está cayendo (Gurtel, Mercasevilla, etc).

Un muy completo estudio, de nuevo del CIS, del año 2002 titulado “Ciudadanía, Participación y Democracia”, nos aclara cuáles son los sentimientos que en los españoles provoca la política (2 sentimientos, respuesta múltiple).

Como veis en el cuadro, los sentimientos provocados son por este orden: indiferencia, desconfianza, aburrimiento. Sólo en 4º lugar: interés.

Primer sentimiento
Segundo sentimiento
Entusiasmo
2.1
2.3
Indiferencia
30.0
15.8
Aburrimiento
14.7
20.4
Desconfianza
26.9
23.8
Compromiso
6.2
8.3
Irritación
3.8
8.2
Interés
11.1
7.8
N.S.
4.3
9.0
N.C.
0.8
4.5

Con esta opinión de la política y de los políticos ¿como me atrevo yo a reivindicarlos? Pues bien, porque sencillamente otra política y otros políticos son posible. No sólo posible: necesario, imprescindible.

El sentimiento de descreimiento y de alejamiento de lo político por parte de la ciudadanía sólo favorece a aquellos que actualmente se benefician del actual orden de cosas. Es decir, mantenerse fuera de la política es lo que hace que precisamente todo siga igual.

El orden mundial, el orden local, ha de ser cambiado, y esto sólo es posible con nuestra participación. Es cierto que encontrar un proyecto político con el que ilusionarse cuesta cada vez más trabajo, pero es nuestra obligación el intentarlo.

En Córdoba, para las gentes progresistas, el grado de decepción con la política municipal prácticamente ha tocado fondo. De esa decepción, de una necesidad imperiosa de cambiar las cosas, ha surgido la energía cívica para alumbrar un nuevo proyecto: ECOLO Córdoba.

ECOLO Córdoba es una propuesta de transformación hecha por personas que creemos en la democracia y en el valor de la política desde la ética, las capacidades ciudadanas, la gestión profesional y la experiencia cotidiana, y que emprende el camino sin ataduras políticas, sin hipotecas, sin consignas.

Si te ilusiona cambiar el orden de las cosas, ilusiónate con nosotros. Estamos abiertos y deseosos de que te sumes a nuestro proyecto.


ECOLO Cordoba (en facebook; necesario tener cuenta)